Ha sido un largo trecho para el jovencito oriundo de Medellín, Colombia que nació para jugar fútbol según se acuerda el ahora a los 58 años de edad en Kingsland, un pueblo al norte de Jacksonville en la frontera de Florida y Georgia.
Luis Fernando Herrera Arango jugaba fútbol todo el tiempo en su niñez con sus amigos del barrio Buenos Aires, un vecindario de clase media baja. Colocaban ladrillos en las calles para bloquear espacio y armar arcos temporarios y pasaban horas jugando.
“Mi mamá me decía que sabía que yo iba a ser futbolista desde que estaba embarazada contigo, pues me movía y pateaba mucho en su vientre”, dijo el “Chonto” Herrera, así como lo conocen en el mundo del fútbol por décadas.
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| Photo credit: Don Juan Corzo |
Mientras él se dedicaba a practicar y a perfeccionar su pasión futbolística, el talentoso adolescente trabajaba en el negocio de su padre que era cerrajero de casas al final de los 70s. Aunque a varios de sus amigos les empezó a gustar la parranda y las tentaciones que vienen en ese ambiente, al Chonto nunca le atrajo trasnocharse en fiestas. Incluso amigos parranderos que reconocían su gran potencial le aconsejaban que se mantuviera enfocado en el fútbol.
Sus padres querían que él continuara sus estudios universitarios después de graduarse del bachillerato, pero el Chonto decidió dedicarse de tiempo completo al popular deporte,pues fue reclutado profesionalmente a los 17 años de edad por Deportivo Independiente Medellín. Así empezó su gran carrera profesional en los 80s que lo llevó a ser uno de los jugadores del Atlético Nacional de Colombia con victorias en ligas y estuvo en el equipo que ganó la Copa Libertadores en Sudamérica en 1989. Herrera también jugó en varias ediciones de la Copa América y Copas Mundiales del Fútbol a principios de los 90s.
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| Photo credit: Don Juan Corzo |
“En la época de los 80s y 90s fue una época brillante para nuestra selección”, dijo Herrera. “Creo que los buenos jugadores que hay de fútbol a nivel internacional, nuestra selección les abrió las puertas, como a James Rodriguez, Yerry Mina, Juan Cuadrado”.
A pesar de ese gran periodo del fútbol en Colombia, el Chonto reconoció que fue un periodo difícil para la gente en Colombia por la presencia del narcotráfico y la criminalidad, pues el mismo fue afectado cuando su hijo de tres años de edad fue secuestrado para sacarle dinero. Sin embargo, fue rescatado en solo unos días por las autoridades gracias a la ayuda de la misma comunidad que estaba indignada. El famoso futbolista piensa que la presencia mundial del fútbol colombiano fue como un alivio y un sentido de orgullo para el pueblo lidiando con ese periodo duro en Colombia.
Gracias a su gran desempeño y reconocimiento en el mundo futbolístico, el Chonto vino a Estados Unidos en 1999 y vivió en Nueva York por cinco años entrenando a adolescentes en equipos juveniles que ganaron a nivel nacional. Después de esa experiencia como entrenador deportivo en Nueva York y en Florida por dos años, él volvió a Colombia en el 2007 para ser técnico de equipos en Bogotá, Cali, Medellín y Huila por varios años hasta que regresó a Estados Unidos para residir en Florida.
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Desde que regresó en el 2020, el Chonto fundó CH4 Soccer Management, una compañía de entrenamiento con su yerno Andres Lopez, a quien él entrenó con otros jóvenes cuando era adolescente. Aparte de entrenamiento de jugadores, su compañía hace torneos también donde los equipos ganan premios con la ayuda de patrocinadores de los juegos en Florida y en Georgia.
“Me dedico a la dirección técnica y a formar buenos jugadores pues me considero más un formador que un entrenador”, dijo El Chonto. “Me gusta formar niños para ser buenos deportistas pero mejor aun excelentes personas”.
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A version of this story was published in Hola News Newspaper on May 18, 2022.
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